Una disputa por un partido de béisbol ocasionó que el Chueco privara de la vida a un habitante de Cerocahui y posteriormente a dos religiosos y un guía turístico.

Se trató de dos hechos distintos; en el primero, el Chueco arribó a un domicilio de la localidad para ultimar a un habitante identificado como Paul ‘B’; en este evento, otra persona fue privada de la libertad.

De acuerdo con la Fiscalía, las personas secuestradas no fueron turistas, sino habitantes del lugar.

Horas después, en un hotel, Pedro ‘P’ (guía de turistas) fue privado de la libertad y, tras escapar, fue auxiliado por dos religiosos, quienes fueron ultimados.

Los cuerpos de las víctimas fueron localizados en la región de Pitorreal.