En su juventud fue cobrador de seguros, vendedor de refrescos y chofer de una ferretería. En 1982 empezó a militar en el Partido Acción Nacional como cuidador de casilla y, luego, su identificación con “la gente de las colonias” lo fue llevando a diferentes responsabilidades hasta que fue electo presidente del Comité Municipal. Después de su actuación en la Comuna, donde protagonizó duras batallas para que el Pronasol –del cual era presidente municipal– le diera su lugar a la administración panista, compitió en las elecciones de noviembre de 1993 como candidato por el IV Distrito al Congreso del Estado y ganó. En la Legislatura encabezó los esfuerzos de la oposición por aclarar las irregularidades cometidas en el interinato del gobierno del Estado de 1991 a 1993. Como miembro de la Comisión de Hacienda, luchó por esclarecer la cuantiosa deuda estatal, la venta de los activos de Cordemex y los malos manejos en numerosos ayuntamientos. En 1995 ganó la alcaldía de Mérida y, en 2001, la gubernatura, convirtiéndose así en el primer gobernador de oposición. De 2008 a 2011 fue titular de la Profepa.