Los tiempos se adelantan, no ha concluido ni siquiera el mes patrio y ya los campechanos se encuentran listos para la celebración del Día de Muertos, sobre todo quienes depositan su interés, practicando o creyendo en las ciencias ocultas.

En un recorrido se observó que en un domicilio de la calle 10 por Av. Ramón Espínola Blanco, del fraccionamiento Villas de Kalá, en el techo de una vivienda, en lo alto resalta a todo público la imagen de la santa muerte, rodeada de calaveras y sillas de colores que causan el asombro y sorpresa de los transeúntes y automovilistas que por ahí circulan.

Algunos vecinos aseguran que la imagen a la intemperie es una posible protección para quienes creen en dicha filosofía, como para repeler y ahuyentar las enfermedades y la propia muerte que por mucho le ha costado la vida a tantos campechanos como resultado del Covid-19.

Dicen que en este sentido la muerte se percata que no le tienen miedo y sigue de largo.

Otros más, al transitar por la zona aseguran que ésta peculiar imagen en el techo es parte de una tradición, que es un altar que advierte que el Día de Muertos está más cerca y que nunca hay que olvidarse que la realidad que vivimos es otra, que nadie tiene comprada la vida y qué, yacen en el descanso eterno personas que ni siquiera estaban preparadas, ni ellos, ni sus familias.

Muchos no lograron despedirse de sus seres queridos y esperan el Día de Muertos para celebrarlos de acuerdo a nuestra tradición.

Hay quienes se sorprende y se espantan, pasan por dicha vivienda y se persignan como para rechazar esta creencia a la muerte. Reclaman que Campeche ha llorando tanto a sus muertos que no pueden ponerle un altar a quien se los llevó.