Sería la Fiscalía de Quintana Roo la que tendría a su cargo las investigaciones por la ejecución de ocho personas que fueron encontradas en un municipio yucateco.

Ayer se confirmó que los cadáveres tenían huellas de tortura. Los levantados y asesinados serían oriundos de zonas del área de Chetumal, como el poblado Nicolás Bravo, distante a unos 50 kilómetros de la capital del vecino estado.

Lo que sí llamó la atención es que los responsables de la múltiple ejecución transitaron unos 300 kilómetros por carreteras quintanarroenses y yucatecas desde el levantón hasta arrojar los cuerpos sin que ninguna corporación policiaca o militar se haya percatado.

La Fiscalía General de Quintana Roo se encargaría de las investigaciones por el homicidio de ocho personas que fueron secuestradas en Mahahual, cuyos cuerpos fueron hallados en territorio yucateco el pasado sábado.

Fuentes de la Policía señalaron que aunque los cuerpos no han sido identificados científicamente, por algunas señas particulares se pudo determinar que se trata de las personas que la semana pasada fueron secuestradas por un grupo armado en Xcalak, una playa que pertenece al municipio de Othón P. Blanco, en Quintana Roo.

Se dijo que el lugar donde fueron hallados los cuerpos es de difícil acceso, por lo que se cree que fueron arrojados ahí en la madrugada.

Los cadáveres, con huellas de tortura, ya se encontraban en descomposición; estaban envueltos en una lona, llenos de lodo y tierra negra que no corresponde a la terracería de la zona, por eso se cree que los asesinaron en otro sitio.

Como informamos, los cuerpos corresponderían a José Luis Vallalpando Pat, de 46 años de edad; Edgar Medina Romero, de 19; Heber Crescencio Laneros Vidal, de 40; Flavio César Roblero García, de 24; David Azael Pool Poot, de 22; Moisés Nicolás Cuervo, de 41; José Ismael Dzul Chan, de 20; y Emilio Roberto Manzano Villamil.

Los reportes de su desaparición los recibió la Fiscalía del vecino estado la semana pasada.—