Con el estreno de “Cassandra: Demencia civil”, bajo la dirección de la maestra Rosa Márquez Galicia, hoy viernes regresan las prácticas escénicas de los alumnos de la Licenciatura en Teatro de la Escuela Superior de Artes de Yucatán (ESAY).

Serán dos presentaciones, a las 7 y 9 de la noche, con repartos diferentes (de los colectivos Uróboros e Ígneo), según dieron a conocer la directora de la obra y Ligia Barahona Castro y Francisco Solís Muñoz, directora y director académico de la Licenciatura en Teatro.

“En un sentido estricto tendremos dos estrenos con dos versiones distintas de la misma obra”, señaló Solís Muñoz al dar detalles de la obra, con cuyas funciones se estrenará además la caja negra de la escuela.

Por su parte, Ligia Barahona destacó que es la primera vez que una egresada de la ESAY está a cargo del trabajo, por decisión y sugerencia del grupo.

Contemporánea

“Cassandra...” retoma la historia del personaje de la mitología griega desde una perspectiva contemporánea para hablar del sistema de poder. “Es una crítica a los sistemas de poderes, a los sistemas de sumisión; mediante el mito griego podemos hacer una traducción contemporánea de quiénes son los reyes y los dioses actuales y quiénes podrían ser los oráculos”, precisó la maestra Márquez.

Explicó que “Cassandra: Demencia civil” surgió también a partir de la interpretación de textos de Christa Wolf, Angélica Liddell, Virginie Despentes, Emilio García Wehbi y Esquilo, y que parte de la idea fue reivindicar al personaje y su papel en la sociedad.

“Lo retomamos desde una postura muy personal: qué significa la mujer ahora en nuestra sociedad, qué deseos tenemos no solamente como mujeres sino como entes, cuál es nuestra relación con el sistema de poder, cuál es nuestra relación con la libre adquisición de muchas personas…”, apuntó.

“Si empezamos a pensar e investigar sobre el futuro obviamente nos vamos a de

caer, nos vamos a deprimir un poco, pues el futuro que estamos construyendo es un futuro que destruye”, dijo la maestra Márquez, para luego resaltar que, si bien la obra es existencialista y un poco nihilista, no es pesimista.—