Evan McPherson se quedó observando el lugar donde colocaría la patada más importante de su vida y acertó , para que los Bengalíes de Cincinnati alcanzaran el duelo por el título de la Conferencia Americana por primera vez en 33 años.

De hecho, el novato de 22 años, predijo lo que conseguiría.

“Él estaba hablando (con el quarterback suplente Brandon Allen) cuando iba por la patada”, relató el quarterback Joe Burrow con una sonrisa. “Dio una pequeña patada de práctica y dijo: ‘Creo que vamos al partido por el campeonato de la AFC’, antes de salir y patear”.

El gol de campo de 52 yardas cuando expiraba el reloj fue su cuarto sin fallar en el triunfo por 19-16 ante Tennessee. McPherson tiene marca de 8-8 en dos partidos de playoffs.

“Tiene hielo en las venas” dijo el entrenador de los Bengalíes Zac Taylor.

“Es mi trabajo”, desestimó McPherson. “Es lo que hago para vivir. Es mi trabajo mantenerme calmado y sereno en momentos como este”.

Los Bengalíes confiaban en que verían esta fuerza mental y precisión cuando lo seleccionaron en la quinta ronda del draft.—