PROGRESO.— En este puerto solo hay cuatro guías de turistas que están certificados: tomaron un curso, presentaron el examen, lo aprobaron y cuentan con credencial que expide la Secretaría de Turismo federal.

Sin embargo, fueron desplazados por guías “piratas” que no tienen la certificación ni los suficientes conocimientos, pero son empleados por empresas turísticas.

Los guías certificados son Pedro Flores Medina, Raúl Montor Pérez, Juan Carlos Morales Sandoval y el taxista Raúl Alvarado Manzano, quienes al comenzar a llegar los cruceros fueron los primeros en prestar servicio a los pasajeros.

No tenían competencia y las empresas dedicadas al turismo todavía no empleaban a guías “piratas”.

Flores Medina, quien es de los pioneros como guía de turistas e incluso tenía una camioneta para el transporte de visitantes, recuerda que el primer curso para la certificación de guías de turismo lo impartieron en 1998 en la Facultad de Antropología e Historia, cuya entonces directora lo autorizó.

El curso duró cinco meses y lo impartieron académicos de esa facultad. Se tenía que presentar examen para obtener la credencial, narra Flores Medina.

“En una ocasión escuché a un guía ‘pirata’ decir una sarta de mentiras a los turistas sobre los cocodrilos y el cráter de Chicxulub, pero nadie le dijo nada y los visitantes se quedaron con una historia falsa del meteorito y de los cocodrilos”, indica.

Por sus conocimientos sobre el cráter de Chicxulub, Flores Medina prestó sus servicios de guía turístico al científico Alan Russell Hildebrand, considerado el descubridor de ese cráter.

Flores igual atendió al actor Morgan Freeman en su visita a este puerto para la realización del documental “La historia de Dios”.

Un buen guía, dice, tiene que estudiar mucho, leer libros de historia y geografía. En el caso de Yucatán, conocer los cenotes, las zonas arqueológicas, los puertos, las charcas salineras, manglares, la fauna silvestre y estar actualizado para dar una buena explicación. No hay que inventar historias, recalca.—